Los padres de Charlie Gard, el bebé de once meses que está recluido en el Hospital Great Ormond Street de Londres en el Reino Unido desde septiembre de 2016 han emitido un comunicado donde anuncian que han tomado la decisión de desconectar al pequeño.
Dieron por terminada la batalla legal que enfrentaban con el Tribunal Supremo Británico para que permitieran trasladar a Charlie a Estados Unidos para recibir un tratamiento médico experimental para lo que recibieron apoyo del presidente Donald Trump y del Papa Francisco.
Los últimos análisis de Charlie, vistos por el médico de Estados Unidos, revelaron que su estado de salud se ha deteriorado hasta tal punto, que no hay nada que puedan hacer para salvarlo.
Chris Gard y Connie Yates aseguraron que “Como dedicados y amorosos padres de Charlie, hemos decidido que ya no es la mejor decisión para él seguir buscando un tratamiento y dejaremos ir a nuestro hijo para que esté con los ángeles”.
El síndrome de agotamiento mitocondrial que padece Charlie solamente lo sufren 16 personas en todo el mundo, generalmente causa la muerte el primer año de vida.
Los padres de Charlie llegaron al Tribunal Europeo de Derechos Humanos para pedir ayuda, pero ellos también opinaron lo mismo que los médicos tratantes de Charlie: lo mejor era desconectarlo del soporte vital.
Los padres de Charlie agradecieron todo el apoyo recibido para ofrecerle a su bebé otra oportunidad y comentaron que “Hay una simple razón por la que el tratamiento ya no puede realizarse y es el tiempo”.
“Ha sido desperdiciado mucho tiempo. Estamos ahora en julio y a nuestro pobre niño se le ha dejado solo echado en un hospital durante meses sin recibir ningún tratamiento mientras se luchaban largas batallas judiciales. Trágicamente, los informes médicos de Charlie han sido revisados por médicos independientes, ahora sabemos que si a Charlie se le hubiera dado el tratamiento antes, habría tenido la oportunidad de ser un niño sano y desarrollarse normalmente.
“Pero permitieron que la enfermedad de Charlie lo deteriora devastadoramente hasta un punto sin retorno. Tendremos que vivir con los ‘y qué hubiera pasado si’ que nos perseguirán por el resto de nuestras vidas”, comentaron los padres.
También aseguraron que: “A pesar de que se referían a veces de nuestro hijo como si no mereciera una oportunidad de vida, él es un total guerrero y no podríamos estar más orgullosos de él, lo extrañaremos terriblemente”.
“Su cuerpo, su corazón y su alma podrán irse, pero su espíritu vivirá para la eternidad y hará una diferencia en la vida de las personas por muchos años, nos aseguraremos de eso”.
Los padres del pequeño solicitaron que respeten su privacidad en este momento tan duro donde tendrán que darle el último adiós a su bebé. “Ahora vamos a pasar nuestros últimos preciosos momentos con nuestro hijo Charlie, que lamentablemente no llegará a vivir para su primer cumpleaños, en solo dos semanas”.
“Te amamos mucho. Siempre lo hemos hecho y siempre lo haremos, y lamentamos que no pudimos salvarte. Dulces sueños bebé, duerme tranquilo, nuestro hermoso pequeño, te amamos”, finalizaron los padres de Charlie las emotivas palabras que le dedicaron.
Esperamos que reciban la fortaleza necesaria para enfrentar tanto dolor, ellos pueden estar satisfechos de que hicieron todo lo posible por salvar a su pequeñito. Comparte esta emotiva noticia con tus seres queridos.