Cuando se presenta alguna emergencia médica no hay nada más importante que contar con la ayuda de paramédicos y una ambulancia lo más pronto posible. Lamentablemente para un anciano que residía en un hogar de cuidados esto no fue posible debido a que una serie de personas que residían en la misma urbanización decidieron prohibirle por completo la entrada a la ambulancia.
El hombre que requería atención médica tenía 90 años.
Cedarwood House es un pequeño hogar para personas con demencia y se encuentra en un recinto privado. El hogar se especializa en personas que hayan sido diagnosticadas con demencia y que tengan una edad mayor a los 65 años.
El hogar suele atender cerca de 20 pacientes de manera simultánea.
Debido a la naturaleza de este lugar, se ven obligados a realizar constantes llamadas a la ambulancia cada vez que alguno de sus pacientes se encuentra en estado crítico, pero esto no ha sido del agrado de los vecinos del lugar.
Ya se habían reportado varias discusiones en torno a las molestias que esto podía causar pero recientemente las cosas llegaron mucho más lejos en un momento en el que la vida de alguien pendía de un hilo.
“Entiendo que se frustren porque hay muy poco espacio en el estacionamiento pero era una emergencia y desafortunadamente un paciente falleció”.
El paciente se encontraba en situación crítica así que la ambulancia se dirigió de inmediato hacia el lugar. Cuando llegaron, los vecinos hicieron barricadas para impedir por completo el paso del vehículo. Los paramédicos trataron de explicar la situación pero no llegaron a ningún acuerdo y las barricadas se mantuvieron durante más de tres horas.
“Había dos autos bloqueando la ambulancia. Un hombre y su esposa. Es indignante”.
Los vecinos explicaban que ellos necesitaban ese espacio para poder entrar y salir de su urbanización.
“Yo también tengo un trabajo que hacer”.
Mientras tanto el anciano no pudo recibir la ayuda que tanto necesitaba. Lucy Hunt, la encargada del hogar de cuidados, explicó que el paciente se encontraba en sus últimas horas pero que la reacción de los vecinos igual resultaba inaceptable.
“El hombre falleció antes de que hubiesen podido ayudarlo, pero si hubiésemos necesitado una respuesta rápida de la ambulancia no habrían podido”.
Como no lograban avanzar en la ambulancia, uno de los paramédicos trató de llevar el equipo necesario hasta el hogar de cuidados pero en ese momento también tuvo que enfrentar fuertes agresiones verbales por parte de los vecinos.
El hogar esta ubicado en las afueras de la ciudad de Sussex en Inglaterra.
Lamentamos la partida de este paciente en medio de tan indignantes circunstancias. Esperamos que lo sucedido sirva como un llamado para que entendamos la importancia de la colaboración.
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