Despedir a un ser querido es una experiencia que nadie quiere vivir, más cuando se trata de un hijo que apenas está comenzando a vivir.
Desafortunadamente eso fue lo que le pasó a Laura Cooke, madre de 29 años, de Kent quien perdió a su bebé recién nacido después de que los médicos la enviaron dos veces a casa desde el hospital con su hijo en brazos.
Laura afirmó que los médicos descartaron la piel moteada y la dificultad para respirar de su hijo, Luchii Gavilescu, quien tristemente murió a los 48 días después de un paro cardíaco en el hospital.
«Murió de sepsis después de ser rechazado dos veces del hospital”.
La pesadilla de Laura y su esposo Vlado Gavrilescu, de 29 años, comenzó 5 semanas después del nacimiento de Luchii, cuando notaron que el pequeño presentaba dificultad respiratoria y una erupción en la piel.
Tras no tener citas disponibles con su médico de cabecera local, Laura llevó a su hijo al hospital Queen Elizabeth the Queen Mother (QEQM) el 29 de noviembre.
La devastada madre afirma que los médicos trataron a su bebé como si tuviera un resfriado común y descartaron los exámenes de sangre porque «no había nada de qué preocuparse».
Al ver que su hijo no mejoraba, Laura siguió la recomendación de su médico de cabecera y regresó al hospital. Pero nuevamente fue enviado a casa con gotas de solución salina después de que le diagnosticaron un resfriado común.
Durante los días siguientes Luchii empeoró, perdía y recuperaba la conciencia, su piel estaba moteada y su orina era muy oscura.
En la mañana del 06 de diciembre, Laura preocupada y llena de pánico por la salud de su hijo visitó a su madre.
“Llegué a casa de mi madre y me eché a llorar. Le dije que el bebé no se veía bien. Estuvo de acuerdo conmigo y me dijo que su respiración no estaba bien. Estaba muy pálido, letárgico y flojo».
Llamaron a emergencias y la ambulancia llegó después de esperar media hora porque ya que no eran una prioridad.
Llegaron al QEQM justo después del mediodía, pero no fue hasta cerca de las 6:00 pm que le asignaron una cama. En ese momento le hicieron una prueba de gases en sangre, y los resultados causaron pánico al equipo médico.
“Comencé a llorar y mi corazón se aceleró. Entré en pánico y no supe qué hacer o decir».
Inmediatamente un médico dijo que por qué no se lo habían llevado antes. Luchii estaba muy deshidratado.
Los médicos lucharon por insertar una cánula intravenosa para suministrarle antibióticos y líquidos y lo llevaron rápidamente al quirófano para colocarle un tubo respiratorio.
Los médicos le informaron que el tubo de respiración se había insertado con éxito y que Luchii sería trasladado al Hospital de Niños Evelina de Londres para su recuperación durante unos días.
“Estábamos seguros de que estaba bien. Dijeron que se quedaría en Londres durante 5 días”.
Pero al minuto siguiente, un médico diferente les dijo que su hijo había sufrido un paro cardíaco y estaban tratando de reanimarlo.
“Entonces entró un médico y lo primero que dijo fue’lo siento’ caímos al suelo gritando y llorando. Simplemente no podíamos creerlo».
Tristemente Luchii fue declarado muerto a las 9:37 pm el 06 de diciembre. Sus padres devastados afirman su muerte fue a causa de una serie de errores hospitalarios.
“Esto era completamente prevenible. Ninguna Navidad será igual para nosotros. Esto nos ha destrozado la vida”.
Fue muy desgarrador decirles a sus otros hijos, Anne Archie, de 10 años y Macie, de 9 años, que su hermanito ya no estaba con ellos aquí.
“Tenía que decirles que se había ido al cielo. Me preguntaban por qué y no sabía cómo explicárselo».
Esta madre de pregunta una y otra vez por qué nadie creyó en ellos.
“Iremos hasta el final hasta que obtengamos justicia para Luchii. No podemos permitir que otra familia viva esta terrible experiencia».
Un portavoz de East Kent Hospitals expresó sus condolencias a la familia de Luchii, y lamentaron la pérdida del bebé.
«‘Hemos comenzado una investigación exhaustiva sobre el trato que recibió Luchii. Pedimos disculpas y trabajaremos lo más rápido posible para poder darles las respuestas que necesitan”.
Según información local, la última inspección de la Comisión de Calidad de la Atención del hospital que se publicó en febrero concluyó que el QEQM requería mejoras. Es muy lamentable que todo esto haya sucedido, nada ni nadie podrá devolverles a estos padres la vida de su bebé.
No dejes de compartir la historia de este Ángel que alzó su vuelo antes de tiempo, para apoyar a los padres de Luchii y evitar que se repitan incidentes como estos.