No podemos negar que ante la terrible situación que vive el mundo como resultado del COVID-19, muchas personas han sacado lo mejor de sí intentando reflejar una atmósfera de solidaridad en medio del caos.
Múltiples iniciativas en apoyo a todas a las personas que luchan contra el coronavirus, así como ánimo para las quienes cumplen la cuarentena se han dado a conocer a través de las redes.
El gesto de este restaurante se ha ganado la admiración de todos los camioneros.
Actualmente Italia y España son de los países con mayor número de contagios y víctimas letales, ante esta situación el gobierno ha declarado estado de alarma y cuarentena obligatoria para para evitar la propagación del virus.
Dando como resultado el cierre de muchos locales, incluyendo bares y restaurantes. Sin embargo, esto no limita a un pequeño grupo de altruista que da su apoyo más allá de las redes para alimentar a quienes lo necesitan.
Mientras se preparaban para el cerrar por la cuarentena varios camioneros tocaban por las ventanas pidiendo café o poder usar el baño.
El Hacho, es un hotel restaurante frecuentado por camioneros a la altura de Lora de Estepa, situado en A-92, en el kilómetro 110 que colinda entre las provincias de Sevilla y Málaga.
Si bien todos deben cumplir con el aislamiento social, los dueños y personal del restaurante no querían abandonar a los camioneros quienes a diario circulan transportando alimentos o distintos productos no perecederos.
Al no poder darles la atención que merecían surgió la idea del autoservicio.
Por ello decidieron habilitar una pequeña furgoneta ubicada en el estacionamiento del local abierto las 24 horas que hace la función de autoservicio.
En lo cristales uno de los dueños del restaurante dejó algunos mensajes para los transportistas.
Estamos con los camioneros. Esta lucha es de todos. No podemos abrir, pero sí apoyar”.
En otro mensaje se puede leer:
Coja lo quiera, estamos aquí las 24 horas, autoservicio gratis”.
El emotivo gesto ha dejado a todos los camioneros con infinito sentimiento de nostalgia, cada vez que un trasportista hace una parada y continua con su ruta después de tomar café o comer algo, tocan el claxon del camión en señal de agradecimiento por tan hermoso gesto.
David Borrego es uno de los propietarios del El Hacho, destaca que después de tantos años de servicio se les rompía el corazón no poder atenderlos.
Uno de los transportistas compartió un vídeo en Twitter y ha logrado miles de reproducciones.