Cuando una persona sabe lo que quiere y se propone una meta, hace lo imposible por alcanzarla. Las dificultades se convierten en retos a superar, así piensa un joven argentino que se esfuerza cada día por lograr su sueño de ser un gran profesional.
Alex Tronchin, es un argentino de 19 años, que estudia Historia en la Universidad De Buenos Aires, tiene dificultades porque no cuenta con los recursos económicos para cubrir sus gastos académicos,
Pasa las tardes en Monte Negro, una estación ferroviaria ubicada en la ciudad del mismo nombre en la Buenos Aires, vendiendo pan casero, donuts y tortas fritas, para costear sus estudios universitarios.
El joven sabe que todo se logra con esfuerzo, y pone su empeño en graduarse.
“Quiero ser licenciado en Historia y por eso hago este esfuerzo”, explicó el estudiante.
En ocasiones sale temprano de sus clases para vender, la mercancía la obtiene de un intermediario, y le gana un porcentaje por cada venta.
Así pasa su día, entre la Escuela Media 3 de Luis Guillón a la que asiste, las dos materias universitarias que adelanta por UBA y la estación del tren Roca en Dardo Rocha y Alem. Está pendiente de sus horarios de clases, para afectar lo menos posibles sus actividades en la universidad.
“Trato de estar de lunes a viernes, todas las tardes y, excepcionalmente, algún día a la mañana. Además, los días que decido arrancar temprano, por lo general a las nueve estoy en Alem y me quedo hasta que venda todo o hasta las 19:30”, explicó Alex.
Durante poco más de un año ha sido modelo, es un joven muy atractivo, pero esta actividad no es muy rentable y por eso debe ayudarse haciendo otras cosas.