La vida a veces nos lanza una «bola curva», hay que admitirlo y por mucho que nos preparemos, por mucho que nos esforcemos y por muchas ganas que tengamos a veces las cosas no resultan como esperamos.
Así le pasó al protagonista de esta historia. Él estaba en la vía directa a cumplir su sueño, la autopista al éxito, el camino con el que había soñado toda su vida.
Pero eso importó muy poco cuando el tren partió sin él a bordo y sus sueños se le quedaron de equipaje, pendientes para la siguiente opción.
Carlos de Antonis es un cantante, su sueño es cantar, su vida entera se la ha dedicado al canto, es su oficio, su pasión, su verdad.
Por eso cuando llegó a la audición de America’s Got Talent no esperaba nada más que demostrar lo que sabía.
La idea de asistir al afamado concurso de talento surgió cuando algo peculiar le sucedió meses atrás en una jornada normal de su trabajo. Carlos de Antonis se encontraba laborando de chófer.
Él estaba trabajando como taxista a través de la aplicación de servicio de taxis, Lyft.
Mientras conducía a sus clientes de un lugar a otro de la ciudad Carlos de Antonis aprovechaba de alegrar su día con las notas majestuosas de sus canciones.
Eran un lujo que no sabían que estaban disfrutando. Escuchar los grandes clásicos de la ópera en un viaje en taxi que pensabas sería ordinario realmente era un lujo digno de los mayores teatros de la ópera.
Y es que antes de que sus sueños se vieran truncados Carlos de Antonis iba camino a una gira con su compañía de ópera.
Pero un giro inesperado del destino cambió sus planes para siempre cuando cuando un accidente automovilístico le envió directamente al hospital por un año y medio.
Carlos de Antonis casi perdió sus dos piernas, tuvieron que buscar un cirujano que se atreviera a salvarlas e insertarle 19 piezas de metal para reconstruirlas.
Al salir del hospital debía realizar las terapias correspondientes y con una gran pila de facturas por pagar, Carlos de Antonis se vio en la necesidad de trabajar en lo primero y más accesible que consiguió: chófer de taxi por la aplicación Lyft.
Pero ninguno de esos contratiempos fueron suficientes para arrancar el amor por la música de su corazón.
Y así fue como, un día cualquiera mientras manejaba su taxi cantando sus alegres canciones uno de sus clientes le grabó verdaderamente impresionado por su talento.
El vídeo rápidamente se hizo viral, pero esto no fue todo lo que surgió de ese increíble viaje de taxi.
Carlos de Antonis sintió de nuevo lo que era ser aclamado, aceptado y aplaudido por su labor por miles de personas que vieron su vídeo. Su cliente de taxi, familiares y amigos, todos lo instaron a participar en el concurso de talento America’s Got Talent.
Así fue como Carlos de Antonis reunió el valor necesario para pararse delante de los jueces a dar su más sentida y emocionante interpretación y tú tienes que verla a continuación.
Muy pocos logran todo lo que desean al primer intento y luego pueden conseguir un nuevo sueño o ayudar a cumplir los de los demás. Otros se pasan la vida entera persiguiendo sueños que nunca alcanzan.
Solo unos pocos afortunados se preparan toda su vida y cuando finalmente se atreven a ir a por lo que quieren y esto se les presenta, se aferran con tanto amor, tanta fuerza y tanto deseo que de pronto todo lo sucedido cobra un nuevo sentido.
Comparte esta preciosa interpretación y recuerda nunca es tarde para alcanzar tus sueños.