Hay momentos en nuestra vida en que quisiéramos devolver el tiempo, para evitar que ocurriera algún acontecimiento que nos ha causado daño o un inmenso dolor. Probablemente así se sintió una familia en Aspen, cuando un terrible accidente enlutó su hogar.
Nathaniel Slaughter y su esposa Sarah vivían de lo más felices en su casa en Aspen, junto a sus hermosos hijos: Henry, Theodore, Jedediah y Herman. Hace pocos días, Nathaniel estaba conduciendo un cargador Kubota Skid Steer, un vehículo que se utiliza para quitar la nieve, y llevaba de compañeros a su esposa y a dos de sus hijos.
Nathaniel su esposa Sarah y su pequeños hijos
Precisamente intentaba despejar la nieve en un campamento en el Aspen Grove Family Camp en Provo Canyon; y Herman de seis años de edad, iba sentado en las piernas de su padre.
De acuerdo a las informaciones emitidas por las autoridades, el vehículo tuvo un movimiento muy brusco, el pequeño Herman salió disparado de su lugar hacia adelante y cayó en el camino.
Todo se convirtió en un caos, una parte de la pesada máquina lastimó gravemente al niño en la cabeza provocando lesiones de extrema gravedad.
El angustiado padre aplicó RCP a su hijo mientras esperaba la llegada de los paramédicos del Departamento de Bomberos de North Fork. El tiempo parecía eterno, y la angustia de la familia era infinita.
Pero lamentablemente de nada sirvieron todos los esfuerzos realizados, el pequeño perdió su inocente vida en un absurdo accidente que jamás debió ocurrir.
«No hay nada que indique que esto fue negligente o que esto fue algo más que un trágico accidente», dijo Spencer Cannon, sargento del sheriff del condado de Utah.
El pequeño Herman
El cuerpo del infortunado niño fue llevado a la oficina forense en Taylorsville para realizar la autopsia de ley. Sin embargo, las autoridades que conocieron del caso creen de antemano, que no puede arrojar nada distinto a lo que dieron sus investigaciones en el lugar de los hechos.
La familia estaba desolada, la tristeza y el llanto era lo único que tenían. Parientes y amigos escribieron en las redes sociales ofreciendo apoyo moral, y su solidaridad a los familiares.
«Herman es uno de los ángeles más dulces del padre celestial, tenía un gran amor por la vida y siempre estaba sonriente y feliz”, expresaron los familiares en la página de GoFundMe creada.
No faltó quien mencionara el peligro que representa hacer partícipe a los niños, sin ninguna seguridad, en actividades con vehículos como un quitanieves.
“Lo siento mucho por esta familia. Las personas hacen esto TODO el tiempo con sus hijos y es muy divertido, pero terriblemente inseguro”, opinó un usuario.
Por desgracia, ya nada puede hacerse por Herman, pero es importante tomar el caso en cuenta extremando la seguridad de los niños para evitar hechos tan dolorosos como el sucedido. Una vida tan frágil puesta en nuestras manos debe protegerse y amarse ante todo.
Comparte esta lamentable historia con todos tus amigos y seres queridos, para que nos tomemos muy en serio la seguridad de nuestros niños en todo momento.