Detrás del uniforme de los policías y de su actitud rígida y severa se esconden seres humanos sensibles con vocación de servicio. En su labor diaria luchan por el bienestar común y trabajan con valentía, aunque en algunos casos pongan su vida en peligro en pro de la justicia.
Muchas veces acuden a un llamado desesperado de auxilio y ofrecen mucho más de lo que contempla su trabajo, ayudando a quienes lo necesitan, tal como el caso que recientemente se difundió en las redes el caso de un oficial que sorprendió a un afligido niño de 13 años regalándole muebles para su hogar.
Recientemente, se hizo viral el gesto de Doug Goodman, un oficial que con frecuencia se reúne con los niños de la Escuela Primaria Hayden Meadows para ofrecerles su orientación y ayuda. Para él, la escuela representa una extensión de su propia familia, es muy admirado y querido por los estudiantes y el personal.
Un miércoles por la mañana, Goodman estaba prestando sus servicios vigilando el tránsito desde su auto de patrullaje cuando vio algo que lo hizo interrumpir su labor, sentarse y tomar nota.
Notó a un estudiante llorando, con el pelo desordenado y cargando su gorra, estaba muy triste porque su hermano mayor, que asiste a la misma escuela lo había dejado solo.
Él salió de su auto para consolar a este alumno de primer grado, le abrochó el abrigo y le dio la calma que necesitaba.
Lo acompañó y se sentó a conversar con él, levantó su capucha y lo ayudó a calentar sus manos.
Mientras todo esto ocurría la madre del menor estaba observando sin que el oficial lo notara, ella miró con asombro y admiración el gesto del policía con su hijo y se sintió tan conmovida y agradecida que quiso compartirlo en su perfil de Facebook.
“Este oficial se llama Doug, tiene el número 34 en su identificación, y es uno de los seres humanos más increíbles que me he encontrado. Siempre asegurándose de que los niños estén protegidos, siempre haciendo todo lo posible por servir a los demás”, relató.
“Quería compartirlo porque hizo un acto de bondad que derritió mi corazón en esa fría y amarga mañana, y para mí eso no sucede a menudo”, continuó la madre.
Para el niño, este oficial es como su otro hermano mayor, le ofrece seguridad, compañía y apoyo comprendiendo las necesidades de un pequeño de su edad.
Ojalá que todos supieran reconocer la importancia de tratar a los niños con el amor y respeto que se merecen sin que nadie se aproveche de ellos solo porque son dependientes y vulnerables. Depende de eso construir ese mundo de paz y con valores que todos soñamos.
Comparte el gesto de este ejemplar oficial que conmovió a miles de personas.