Yesenia Aguilar era una joven que se encontraba muy ilusionada con la llegada de su bebé. Cuando estaba al final de su embarazo, decidió dar una pequeña caminata junto a su pareja, no podían imaginar que algo tan inocente como un paseo, podría cambiarlo todo.
Yesenia apenas tenía 23 años cuando sufrió el accidente.
Un vehículo llegó a toda velocidad e impactó contra la pareja. Yesenia no logró sobrevivir, los médicos hicieron todo por salvarla, pero su estado era muy grave. Sin embargo, realizaron una cesárea y lograron salvar la vida de su bebé.
Todo sucedió en las calles de Anaheim en California.
Con el corazón roto, James Alvarez le dio la bienvenida a su hija. Fueron días muy duros para él, pidió un permiso de un año en el trabajo para poder dedicarse tiempo completo a su pequeña y recuperarse de la tragedia que acabó con la vida de su esposa.
Yesenia estaba embarazada de 35 semanas.
Lo más indignante del accidente era que el conductor se encontraba bajo el efecto del alcohol y además tenía su licencia de conducir suspendida. Ahora enfrenta cargos judiciales por sus acciones y la familia de Yesenia quiere dar a conocer su historia.
“Tenemos que ser responsables y pensar en la vida de los demás”, dijo James.
Es necesario concientizar al mundo entero sobre el enorme peligro que significa conducir bajo la influencia del alcohol: alguien tomó la decisión de hacerlo sin pensar en las consecuencias y ahora la bebé Adalyn Rose Alvarez-Aguilar nunca podrá conocer a su madre.
“Mi bebé es el último regalo que me dio mi esposa. Es una bendición y un milagro”, dijo James.
Un mes antes de la tragedia, Yesenia y su pareja se hicieron una sesión de fotos con Grisel Leyva. Las fotos resultaron maravillosas y James decidió continuar con los planes de Yesenia y hacerle una sesión de fotos a su hija.
“Quiero que la gente lo piense tres veces, no dos, antes de conducir bajo los efectos del alcohol. Estas acciones pueden destrozar por completo la vida de toda una familia”, dijo Leyva.
Por suerte, la dedicada fotógrafa se las ingenió para que Yesenia estuviese presente. Utilizaron sus flores favoritas, sus objetos más queridos y una imagen de ella cuando estaba embarazada. El resultado fue conmovedor.
“No conduzcan bajo los efectos del alcohol”, fue el lema con el que Leyva compartió las imágenes.
Las fotos se hicieron virales y dieron a conocer por el mundo entero el caso de Yesenia. Esperamos que su bebé escuche las maravillosas historias sobre su mamá y que su trágico caso se convierta en un llamado de alerta. Esto tiene que parar.
Une tu voz y comparte este valioso mensaje. Nadie merece perder a sus seres queridos de una manera tan indignante y dolorosa.