Las estadísticas de casos en los que se vulnera el derecho de las mujeres son espeluznantes. Lamentablemente, México encabeza dichas listas y podemos ver a cientos de personas movilizadas al respecto.
Esta es la historia de una joven que vivió momentos aciagos y afortunadamente logró sobrevivir para contarlo.
Brenda de la Mora
Brenda de la Mora, una joven dedicada a la organización de eventos, se encontraba en una estación de autobuses al norte de la Ciudad de México y decidió abordar una unidad de Uber. Nunca imaginó que viviría una situación tan increíble como desagradable y sobre todo peligrosa.
Brenda, quien tenía como destino Polanco, planeado en la ruta del Uber, reaccionó al ver que el chófer se dirigía hacia Ecatepec un lugar completamente diferente y muy lejano a su destino. Ella, de inmediato envió su ubicación a un amigo. Sabía que algo marchaba mal.
Cuando preguntó al chófer qué estaba haciendo, apenas recibió respuestas vagas. En algún momento, el hombre le amenazó y sacó un arma para controlar la situación.
Sin embargo, la joven, con teléfono móvil en mano, tuvo oportunidad de forcejear con él. El agresor, le pedía insistentemente que lanzara el móvil por la ventana.
En medio de la confusión, Brenda soltó el teléfono e intentó salir del vehículo. El chófer la tomó por el cabello y en medio de otro forcejeo ella logró alcanzar el volante del vehículo y en medio de lo que sucedía, logró liberarse hasta lanzarse para ponerse a salvo.