Amy Campbell, una madre de 30 años nos cuenta cómo quedó realmente devastada cuando ella y su marido se vieron obligados a desconectar el soporte vital de Esme, una de sus hijas gemelas que habían nacido prematuramente en la semana 26 de gestación.
Esta madre quiso compartir la emotiva fotografía que muestra a Charlotte abrazando a su hermana Esme en una desgarradora despedida.
Tras el nacimiento de Esme y Charlotte, su madre fue recibió el alta médica, pero las pequeñas gemelas debieron permanecer en el hospital bajo observación.
Una mañana en la que Amy paseaba a su mascota recibió la terrible llamada de los médicos para informarle que debían ir a hospital lo más pronto posible. La condición de salud de Esme había empeorado.
Me dijeron que era conveniente que fuéramos al hospital, yo solo sabía que nos iban a decir que Esme estaba muy mal. Me desplomé y un hombre tuvo que ayudarme a ponerme de pie”.
Inmediatamente llamó a Connor, el padre de las gemelas y fueron al hospital. Añadió que fue el viaje más tormentoso que han hecho.
Los médicos nos dijeron que Esme tenía líquido en los ventrículos de su cerebro y que la circunferencia de la cabeza había aumentado tanto que no sabían si podría sobrevivir. Incluso si sobreviviera, no tendría ninguna calidad de vida».
Si lugar a duda, estos padres recibieron la peor noticia de su vida. Debían tomar la desgarradora decisión de desconectar el soporte que mantenía con vida a una de sus hijas.
No queríamos que Esme sufriera, pero ¿cómo decidir cuándo desconectar el soporte vital de tu bebé? Fue una terrible decisión”.
Frente a esta dura realidad, Amy quería que sus hijas se conocieran antes de que Esme se durmiera para siempre.
Connor y yo nunca habíamos sido capaces de sostenerlas a los dos al mismo tiempo, así que las enfermeras se las arreglaron para ayudarnos”.
Amy decidió publicar conmovedoras fotografías del emotivo encuentro de sus hijas gemelas gracias al apoyo de las enfermeras.
Charlotte colocó su brazo alrededor de los hombros de su hermana, un hermoso recuerdo que siempre quedará grabado en el corazón de estos padres.
Las enfermeras las colocaron sobre mi pecho y Charlotte puso su brazo alrededor de Esme y pensé que se querían».
Amy dijo que probablemente Charlotte se estaba poniendo cómoda, pero para ellos es hermoso pensar que estaba acunando a su hermana. Ella es una bebé muy dulce que tal vez la estaba abrazando.
Ese momento de tenerlas a los dos acurrucadas en mis brazos fue el mejor momento de mi vida. A pesar de la devastadora noticia que nos acababan de decir los médicos”.
Después de una tarde compartiendo con sus niñas, Amy y Connor organizaron su bautizo para Charlotte y Esme en la sala de Leeds General Infirmary el domingo 28 de agosto de 2016.
Con el corazón angustiado por tener que decidir cuándo desconectar el soporte vital de su bebé Amy pasó esa noche junto a la incubadora de Esme hablando con su «estrella brillante», escribiendo sobre su «pequeña bailarina».
Íbamos a desconectar el soporte vital después del bautizo, pero no pudimos hacerlo. Fue un día tan lindo y no queríamos despedirnos de ella el día de su bautizo».
Al día siguiente estos padres decidieron que era el momento adecuado para poner fin al sufrimiento de su hija. Amy y Connor sostuvieron a Esme durante 12 horas después de que su soporte vital se apagara hasta que cerró sus ojos para siempre en brazos de su madre.
Traté de no llorar porque quería que estuviera rodeada de felicidad, amor y fuerza. Quería que recordara que tenía una madre fuerte y que no debería temer”.
Esme fue sepultada con el traje de bautizo de Charlotte el 13 de septiembre de 2016. Amy planeó una celebración de su vida en un salón decorado con fotos de su último día juntas, tomadas por la organización benéfica Remember My Baby.
El bautizo fue hermoso, toda nuestra familia y amigos cercanos estaban allí. La iglesia estaba tan llena. Se sintió muy especial. Nos hizo sentir muy amados, y que especialmente Esme era muy amada”.
Amy confiesa que no sabía cómo iba hacerle frente a esa situación tan difícil, pero ha descubierto que los tiempos que más temor ha sentido son los momentos en los que tiene los recuerdos más preciados.
Y esa noche, cuando llegamos a casa vimos una estrella fugaz que cruzó el cielo y sabíamos que era ella. Creo que quería que supiéramos que estaba feliz y amada, y nos hizo entender que realmente habíamos hecho lo correcto». Fue realmente hermoso «.
Amy siente que sus hijas han tenido un vínculo mágico desde antes de que nacieran y que Esme siempre estará allí para Charlotte. Esme compartió el líquido amniótico con su hermana y siempre fue la más fuerte.
Charlotte y su hermanito siempre sabrán de forma natural sobre su hermana Esme. Mantenemos recordatorios de ella en todo nuestro hogar”.
Charlotte ahora tiene 22 meses y se ha recuperado satisfactoriamente.
Desde la partida de Esme, sus padres crearon la organización sin fines de lucro Campbellinas, como una forma de devolver todo el apoyo que recibieron del hospital de Leeds.
Comparte la historia de esta familia que ahora tiene una estrella en el cielo que siempre ilumina su corazón y su hogar.