Sin duda el diagnóstico de estar infectado de coronavirus es algo aterrador para cualquier persona, y saber que aparte de eso estas esperando un bebé lo hace peor. Así le pasó a una mujer en Estados Unidos, pero tenía tres hermosos motivos por los cuales luchar.
Maggi Sillero es una mujer en estado de gravidez que vive en Texas. No se interesaba mucho en hacerse la prueba preventiva de COVID-19 porque no había presentado ningún síntoma. Pero el 8 de mayo fue al Hospital de la Mujer de Texas para hacerse la prueba, estaba en la semana 29 de su embarazo.
Por desgracia, tanto ella como su esposo salieron positivos y tuvo que separarse de él durante el resto de la gestación. Estaba embarazada de trillizos y muy preocupada por lo que eso podría representar para los niños que llevaba en su vientre.
Le repitieron cinco veces las pruebas para detectar si aún tenía COVID-19 y los bebés eran monitoreados todos los días. El segundo resultado llegó el 04 de junio y dio negativo, y ese mismo día una ecografía indicó que uno de los niños tenía el cordón umbilical alrededor del cuello.
«Ya sabía que mis bebés llegarían temprano, y con la prematuridad hay complicaciones», dijo la mujer a un medio de comunicación.
No había tiempo que perder, los médicos indicaron una cesárea; Isabella, Nathaniel y Adriel tuvieron que venir al mundo antes de tiempo. Y a pesar de la alegría que eso representa seguía preocupada por la situación de salud que tenía, era un gran desafío para ella.
“Ver los trillizos todos los días realmente me tranquilizó y me hizo sentir mejor. Los médicos y las enfermeras fueron muy compasivos. Me decían que todo iba a estar bien«, agregó la madre.
En efecto, todo salió muy bien. Isabella, que pesaba solo un kilo y medio al nacer fue llevada a casa, pero sus hermanitos requirieron de más días de cuidados en el hospital, van ganando peso y los médicos están satisfechos con su rápida evolución.
“Lo están haciendo realmente bien. Están siendo saludables. Están creciendo como se esperaba. Por supuesto, son prematuros, por lo que habrá algunos retrasos en ciertas cosas, pero quiero decir, lo han estado haciendo realmente bien. Ese peso ha estado subiendo», dijo la madre de tres.
Cuando la publicación fue compartida en las redes sociales, los internautas le desearon lo mejor a la numerosa familia. No hay duda de que la fortaleza y coraje de Maggi es digna de admirar, ahora tiene más motivos para seguir adelante.
Durante la pandemia que ha afectado al mundo entero, las noticias como esta son una fuente de esperanza. Compártela.