La mayoría de las personas hemos recibido en algún momento de nuestras vidas un curso de primeros auxilios. Muchas veces pensamos que se trata de maniobras que realmente nunca vamos a utilizar pero una emergencia puede presentarse cuando menos lo esperemos.
Tyra Winters es una chica que pertenece a las porristas en la escuela Rockwall de Texas. A mediados de septiembre se dirigió llena de energía al desfile para dejar en alto el nombre de su equipo.
Tyra tiene 17 años
Todo parecía marchar con normalidad, pero de pronto muchas personas comenzaron a comentar que había un niño en la multitud cuya vida estaba en riesgo. Había muchísima gente, así que era muy difícil saber realmente qué estaba sucediendo.
Sin embargo, en cuanto Tyra dio un vistazo a la multitud no tardó en encontrar a un pequeño de tan sólo dos años de edad que no podía respirar.
“Estaba muy rojo. Realmente ya lucía morado”.
Tyra no lo pensó ni un segundo y saltó rápidamente de la carroza. Se acercó hasta el pequeño en apuros y le aseguró a su madre que ella podría ayudarlo. La joven realizó la maniobra de Heimlich y tras un par de minutos en donde todos temieron por la vida del niño; el pequeño logró estabilizarse.
La madre, Nicole Hornack, no cabía en sí de alegría. Ella misma había intentado realizar el mismo procedimiento de primeros auxilios pero no había dado resultados.
“Lo incliné hacia abajo y lo empujé suavemente en la espalda. Comenzó a escupirlo todo”.
A pesar de que se encontraban en un lugar con tanta gente, Nicole había temido lo peor. En cuanto vio que su hijo no podía respirar trató de ayudarlo sin resultado alguno. De inmediato, comenzó a pedir ayuda a todos los que la rodeaban pero nadie había querido acercarse para ayudar. De no ser por la joven porrista, quién sabe qué habría sucedido.
“Básicamente estaba corriendo con él por toda la multitud tratando de que alguien lo ayudara”.
Días después de este momento tan heroico, Tyra se reunió con el pequeño al que logró salvarle la vida. Clarke es tan chico que realmente no recuerda lo que sucedió, pero pasó unos minutos jugando con la simpática porrista mientras su madre continuó agradeciéndole por haber tomado la iniciativa en un momento tan vital.
Tyra conocía la maniobra porque su madre se la había enseñado un año atrás.
Celebramos el gran instinto de esta joven que logró salvar al pequeño Clarke. Esto es una muestra más de la gran importancia de saber primeros auxilios y poder ayudar a tantas personas como sea posible durante una emergencia.
Comparte este bonito rescate para dar a conocer la importancia de la maniobra de Heimlich.