Esta chica hizo algo que no todas nos atreveríamos a hacer: dejar de usar maquillaje durante una semana. Ha decidido compartir con nosotros todo lo que aprendió 🙂 «Después de 17 años usando maquillaje todos los días, quería experimentar lo que sucedería si dejaba de usarlo unos cuantos días».
«Hay muchas creencias acerca de las personas que usan maquillaje; algunos piensan que es por inseguridad o simplemente vanidad; de cualquier manera debo admitir que el maquillaje me da cierta confianza. Desde que tenía 12 años he usado maquillaje todos los días. En mi hogar eso era parte de la rutina diaria, ni siquiera recuerdo a mi madre salir sin maquillarse. Es por eso que decidí hacer este experimento, quería averiguar si mi confianza cambiaría sin usar mis productos de belleza. Fue cuando decidí dejar de utilizar maquillaje 😮 Aprendí un par de lecciones mientras tanto y, a pesar de la terrible incomodidad que sentía, tuve la oportunidad de aprender mucho sobre mí misma»
Día 1: Me di cuenta de que no me sentía a gusto con mi rostro al natural. Para ser franca, hice unos cuantos selfies para lograr uno en el que me sintiera cómoda con mi cara, además de lidiar con mi cabello y ocultar un grano que estaba brotando en mi rostro. Pero sentí un gran alivio cuando las personas comentaban mi foto diciendo lo bien que me veía, aunque en realidad no les creí en ese momento. No me considero una persona insegura y menos si estoy usando maquillaje. Sin embargo, me sorprendí a mí misma sintiéndome cohibida y desconfiada, aunque mis compañeros de trabajo me decían que lucía bien y que tengo una piel muy linda, pero no dejaba de pensar que sólo me lo decían para hacerme sentir mejor. ¡Estaba convencida de que todos me miraban fijamente para analizar mi cara!
Aunque es difícil de creer, me coquetearon aún más que cuando utilizo maquillaje, algo que era bastante confuso. Uno de los primeros días del reto, asistí a un partido y unos chicos querían charlar conmigo, en realidad no me sucede muy a menudo que digamos. Tal vez el no usar maquillaje me hace lucir más «accesible», no lo sé, pero eso tampoco me hizo sentir más confiada 😐
Día 2: No usar maquillaje me dio mucho más tiempo para dormir. Tenía tanto tiempo libre que logré dormir una hora más, ¿puedes creerlo? ¡UNA HORA! Normalmente no tardo una hora en arreglarme, pero hago otras cosas mientras lo hago, así que cuando dejé de maquillarme, tenía tiempo extra y dormí mucho más. ¡Fue genial! 🙂
Día 3: Me salió un terrible grano y descubrí que no usar maquillaje requiere tener agallas. Cuando tengo imperfecciones las cubro, le aplico capas y capas de corrector y base hasta hacerla desaparecer. Pero cuando no usas maquillaje las cosas cambian, el grano está ahí y no hay nada que hacer al respecto. Intenté ocultarlo con mi cabello, pero no puedo engañarme, el barro sigue ahí 🙁
No utilizar maquillaje para ocultar las imperfecciones es aterrador, y definitivamente requiere mucho valor mostrarse al natural; pienso que las personas que eligen no usar maquillaje y mostrar sus rostros aún con defectos, merecen una medalla
Y de hecho, también fue el día en que alguien me dijo lo peor que pudieron decirme: «Luces cansada». Así que por favor, nunca le digan esto a nadie, ¡es desalentador y doloroso!
Día 4: No usar maquillaje hizo que me preocupara menos por mi aspecto en general. El grano seguía ahí, como pueden ver en la foto; pero decidí que quería probar mi confianza y salí al mundo para ver la reacción de otros. Evidentemente mis amigos fueron amables conmigo, pero quería ver la reacción de completos extraños, así que salí a comer y me dediqué a mirar a otros esperando encontrar alguna reacción. No hubo nada, sin embargo noté que las personas eran menos amables conmigo. No puedo decir con certeza si sólo era una coincidencia o era resultado de mi falta de maquillaje.
Día 5: El día que mi novio me hizo sentir bella y segura. ODIO que mi novio haya tenido que levantarme el ánimo, pero cuando le conté que no estaba usando maquillaje él sólo se limitó a decirme: «Te ves fantástica, tal vez no es necesario que uses maquillaje todos los días». Me hizo sentir muy bien, me mantuvo con ánimo durante toda la semana, tal vez porque yo confío en su juicio. Finalmente me sentía bien siendo yo misma y mostrando mi rostro al natural. Dejé de pensar en el hecho de que no llevaba maquillaje y tan sólo me ocupé de mis cosas 😀
Día 6: El día en que comencé a restarle importancia a mis defectos y comencé a apreciarlos. Siempre creí que mis pecas eran un desperfecto, no sé por qué. Probablemente sea «gracias» a los medios de comunicación, ya que nunca muestran a la chica pelirroja con piel pálida cubierta de pecas; sólo muestran chicas de pieles perfectas.
Normalmente cubro mis pecas, así que tengo que admitir que me tomó un poco de tiempo acostumbrarme a verlas siempre y todos los días. Todo el tiempo sentía que debía ocultarlas, pero este día el sentimiento cambió, no sé con exactitud que sucedió, pero ese día las miré y por primera vez me sentí feliz de verlas 🙂
Todo en mi rostro parecía combinar, mi cabello, mis cejas, mi piel pálida,… fue liberador aprender a apreciar lo que soy, esa experiencia me cambió, así que ya no oculto mis pecas desde entonces 😀
Día 7: El día que descubrí que el maquillaje puede ser muy subjetivo. En el último día de mi reto, salí con una amiga a desayunar. Yo me sentía muy nerviosa por salir y encontrarme con personas bonitas, pero mi amiga me subió el ánimo cuando me preguntó si estaba usando máscara de pestañas. Eso me hizo darme cuenta que nuestra apariencia consiste en gran parte en cómo nos sentimos respecto a nosotros mismos. El maquillaje es algo que me gusta usar; me hace sentir poderosa, me da confianza, pero me di cuenta de que en realidad no tiene tanta influencia en la opinión de las personas como yo creía. La clave está en ser uno mismo, sentirse seguro con eso y en como te presentas a las personas. Eso cambia la manera en que otros te tratan 😉
Tal vez nunca deje de usar maquillaje por completo, pero desde hace dos semanas lo utilizo con menos frecuencia, incluso he ido al trabajo sin nada de maquillaje. La verdad es quee aprendido algunas lecciones con este desafío:
1. No necesito maquillarme todos los días. Sobre todo si quiero dormir un poco más o simplemente si no quiero hacerlo.
2. No luzco tan diferente sin maquillaje. Esas ideas sólo existen en mi cabeza.
3. La seguridad es lo más importante; con o sin maquillaje, si te sientes segura las personas te tratarán bien 🙂
4. Salir al natural requiere mucha valentía; me siento orgullosa de mí misma por tener el valor de salir sin nada puesto en mi rostro
Fuente: BuzzFeed
Lo que Erin aprendió con este reto es una muy valiosa lección. A veces nosotras mismas nos sentimos muy presionadas por encajar en ciertos modelos de belleza que pueden llegar a ser muy difíciles de cubrir… pero esta chica nos ha enseñado que el mejor maquillaje de una chica es su confianza y una brillante sonrisa 😀
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