Desde que era muy joven, Vicky Turner se vio obligada a pasar gran parte de su vida en medio de hospitales y duros diagnósticos sobre su salud. Cuando era solo una niña descubrieron que tenía “el tumor de Wilms”, un extraño tipo de cáncer que se desarrolla en los riñones.
Vivky recibió el diagnóstico cuando tenía tan solo tres años.
Tras un duro tratamiento logró curarse por completo, pero años después tuvo que recibir una cirugía para lidiar con un peligroso coágulo de sangre en su cerebro.
“En la escuela primaria era totalmente calva. Mis compañeros de colegio me cuidaban, pero había otros niños que me decían que lucía como un chico”.
Con el paso de los años Vicky se volvió cada vez más fuerte y saludable. Se convirtió en una exitosa auditora de Recursos Humanos y conoció a quien se convertiría en el amor de su vida. En el cumpleaños número 50 de su mamá le presentaron a Simon Eastaugh pero tan sólo 4 meses después descubrió un extraño bulto en uno de sus senos.
“No hay nada que pueda hacer. Tengo una alimentación saludable, no fumo. No entiendo porqué me sucedió”.
Vicky tenía 21 años cuando debió enfrentar la dura noticia: tenía cáncer nuevamente. Se trataba de un tumor en etapa 3 así que su equipo médico decidió que lo mejor sería extirpalo lo más rápido posible.
Varios meses después realizaron una mastectomía doble y le pusieron implantes de silicona. Parecía que lo peor ya había pasado pero Vicky se enfrentó a un duro tratamiento de quimioterapia y represión hormonal para tratar de eliminar cualquier posibilidad de que el cáncer regresara.
“La quimioterapia es muy dura. Pierdes tu cabello y la confianza en ti misma. Me sentía agotada al hacer cosas tan sencillas como subir una escalera. Es un camino muy destructor para intentar salvar una vida”.
Una vez que se recuperó Turner decidió recorrer el mundo y viajó durante meses con Simon. Entre febrero y junio del 2018 recorrieron el sureste de Asia y una parte de Australia. Volvieron a casa por un tiempo para trabajar y en agosto partieron de nuevo para conocer toda Europa. Las últimas navidades las pasaron junto a la familia de Vicky en Bulgaria.
En sus momentos más difíciles Vicky adora andar a caballo.
Después de meses tan felices las malas noticias volvieron a aparecer. Un examen reveló que el cáncer había regresado en etapa 4. No sólo había vuelto a aparecer en su pecho sino también en dos de sus vértebras de manera que no se podía operar. En medio de la devastadora noticia, Simon decidió proponerle matrimonio a Vicky. Quieren aprovechar al máximo del tiempo que les queda juntos.
“No podría haber conocido a alguien más perfecto para mí. Siempre tiene una actitud positiva y me hace sentir mejor sin importar lo mal que puedan ir las cosas”.
No están seguros de cuánto tiempo le queda a Vicky pero planean hacer una hermosa ceremonia principios del 2020. Turner siempre ha soñado con una boda que sea como un cuento de hadas así que Simon está dispuesto a hacer su sueño realidad.
“Me gustaría casarme como una princesa en un hermoso y antiguo castillo histórico”.
Con su enorme sonrisa ante tantas dificultades, Vicky es una verdadera fuente de inspiración para tratar de aprovechar cada día con la mejor actitud posible.
Comparte esta historia apoyar a una joven que sin duda se merece la gran boda que siempre se imaginó en un bonito castillo.